Concluyente emprendedora: Resiliencia, habilidad emprendedora para no desistir.
Por Redacción Red Noticias
Procesadora Láctea Jiménez Méndez SC de RL de CV está constituida por un grupo de mujeres
trabajadoras y con experiencia en la elaboración de queso; son familia madre y 5 hijas.
Rosario, Alma Delia, Liliana, Mariana, Yadira Cecilia y Virginia conforman esta organización. Todas originarias del Valle de Etla, remontan su historia empresarial aproximadamente hace 60 años. Virginia Méndez Méndez y Manuel Jiménez Romero después de unir sus vidas, comenzaron a emprender un negocio familiar con la comercialización del queso y quesillo. Amparado con los conocimientos de la elaboración del quesillo por parte de la familia de Jiménez Romero; Virginia y Manuel colocan las bases de un gran comercio y una hermosa familia. Al momento sobreviven 7 de 8 hijos que engendró la pareja; de esos 7, dos son varones y el resto, las mujeres que hoy en día sostienen la marca Jerusa.
Veinte años después de la unión de Virginia y Manuel, el destino lastimosamente obliga a Virginia a continuar sola en ésta travesía llamada vida, y también, al frente de una casa, de un comercio. Virtuosamente Virginia tuvo el apoyo de sus padres, de los padres de Manuel y su hijo mayor. Todos contribuyeron con el progreso y bienestar de la familia; mientras los hijos mayores se desempeñaban en otros labores para apoyar con los gastos familiares, las hijas menores continuaban sus estudios y trabajando en la elaboración y comercialización del queso/quesillo.
Así pasaron los años hasta que una ellas, de las ahora socias, terminó sus estudios universitarios. Poco después de éste hecho, en el 2011, en el Valle de Etla, precisamente en Reyes Etla, las autoridades municipales y pequeñas organizaciones productoras de los derivados de la leche, organizaron la primera Expo Feria del Queso y el Quesillo, evento en el que participaron 7 familias, entre ellas, la familia Jiménez Méndez. A raíz de éste evento existe la iniciativa de formalizar y concretar la labor en una empresa, con nombre, asociación mercantil, marca del producto, etc.
Para darle identidad corporativa, Alma Delia asistió a reuniones y capacitaciones; posteriormente, habiendo adquirido los conocimientos administrativos gracias a sus estudios universitarios, Rosario se unió a su hermana para la constitución legal de Procesadora Láctea Jiménez Méndez SC de RL de CV.
La cooperativa está representada, dirigida y vigilada por las socias de la siguiente manera:
Presidenta: Rosario Jiménez Méndez
Secretaría: Alma Delia Jiménez Méndez
Tesorera: Liliana Jiménez Méndez
Consta de un Consejo de Vigilancia;
Presidenta: Mariana Jiménez Méndez
Secretaria: Yadira Cecilia.
Su presidenta, Rosario Jiménez Méndez, graduada como Licenciada en Administración de empresas en el Instituto Tecnológico de Oaxaca y, es quien lleva las riendas de la empresa, es quien busca las medidas para hacer crecer, despuntar la Productora de Lácteos y, Alma delia para eficientar la producción y cumplir con los pedidos.
Rosario tiene una característica muy marcada de emprendimiento. Ella posee Resiliencia. Esta capacidad la podemos desarrollar muchos que deseamos emprender, sin embargo, no todos estamos dispuestos a hacerlo.[1]
La palabra Resiliencia es un anglicismo procedente del campo del campo de la física. Descrine la
mezcla de resistencia y flexibilidad.
Se define como la capacidad de un material de recuperar su forma inicial después de la deformación. Este término ha sido adaptado en la medicina y principalmente en la psicología; pertenece a la corriente de la psicología positiva y dináminca, la definición más apropiada para el ser humano es el siguiente: Capacidad que tenemos para encajar, resistir sin rompernos y, con el tiempo, desarrollarnos positivamente a pesar de las condiciones de vida difíciles.
En la medida en que la situación de crisis es más acuciente, las habilidades resilentes son indispensables para las que desean emprender.[2]
Así lo podría mencionar Rosario pues, en consenso con las socias, se han dado a la tarea de innovar en lo que respecta al producto.
También Rosario Jiménez no ha dejado de ser persistente para buscar apoyos. En el 2012 con asesoramiento técnico logró introducir un proyecto para la asociación ante FONAES (ahora INAES) logrando equipar, comprar insumos y materia prima para la procesadora de lácteos por una cantidad de trescientos mil pesos a fondo perdido.
A raíz de haber obtenido este apoyo y, junto con otros subsidios otorgados por la Secretaría de Economía para registrar su marca (Jerusa), Rosario se aventura a tomar decisiones arriesgadas para la empresa.
Mucho antes de estos acontecimientos, debemos resaltar que personalmente y profesionalmente nuestra entevistada ha sufrido grandes pérdidas por las cuales se ha tenido que esforzar el doble. Aunque la empresa funcionará mucho antes de que Rosario egresara de su carrera, pudiendo tener un nicho laboral inmediato, ella eligió, por un tiempo, emplearse en otras organizaciones tales como una desarrolladora inmobiliaria, en un laboratorio y en un despacho jurídico. Esta experiencia le ayudo a examinar las ventajas y desventajas al momento de decidir en qué ente mercantil les convenía constituirse, aprendió acerca de impuestos, programas de control de materias primas y otros aspectos legales. Gracias a éste aporte intelectual, el 5 de octubre del 2011 se constituye el negocio familiar en una cooperativa, en una empresa ya en forma.
En el momento en que Rosario decide dejar de ser empleada para convertirse en dueña –junto con su
mamá y hermanas- de la empresa, inicia su deambular en la búsqueda de crecimiento y expansión. Comienza tocando puertas en incubadoras, y éstas la llevan a inmiscuirse en proyectos de gobierno. Hasta, como ya comentamos, en el 2012 logra obtener un apoyo por parte del FONAES. Efectivamente que para ello, Rosario gasto recursos, tiempo, dinero. Alguna de sus hermanas en su momento se lo recalco, empero, ella no desistió.
Posteriormente la presidenta de Jerusa, Rosario, se aventuró a extender el mercado de su producto geográficamente, decide intentar comercializarlo en Huatulco, Puerto Escondido, incluso se presentó en expoferias en Monterrey y otros estados del norte del país. Apostó demasiado. Las cosas no se dieron como ella suponía, fue un descalabro económico, anímico y un poco, en su relación laboral con sus hermanas, tuvo fricciones. El panorama parecía muy oscuro, pero como dice algún dicho, cuanto más oscuro este es porque más se aproxima el alba.
Hoy en día Rosario continúa asumiendo las consecuencias de esa aventura pero, como ella misma menciona, el que no arriesga, no gana. En virtud de que todo hubiera funcionado, su meta no es trabajar para satisfacción de ella misma sino para beneficiarse en conjunto, en familia, tal y como son.
Continuando con la entrevista, Rosario deja entrever que existen muchas dificultades en el roce cotidiano y laboral con sus socias/hermanas, principalmente por el estado civil de la mayoría, el cual, pone como prioridad la crianza de sus hijos y dedicarse a las labores de su casa –algo normal, comenta- antes que centrarse por completo en la empresa a la cual, muy probablemente pudieran catalogar la visión de Rosario como un sueño guajiro.
De la misma forma, los embates diarios del arduo trabajo, la situación socioeconómica del estado, las dificultades propias del mercado, obligan a bajar los ánimos de Alma Delia y Rosario, socias que se encuentran al frente y de manera completa en la empresa. Para no dejarse llevar por el pesimismo, Rosario menciona que trabaja demasiado en su persona, lee libros de superación personal y de negocios. Tiene en claro y nunca pierde su objetivo pues, independientemente del apoyo brindado o no de sus hermanas, a Rosario le encanta trabajar en equipo y, si es con su familia, es mucho mejor.
Nuestra emprendedora está convencida que tiene un destino para Jerusa. Frecuentemente se repite “La vida es corta. Vine a una cosa y no me quiero ir sin haberlo logrado”. En eso, muestra en sus ojos una infinidad de esperanza, sonríe y añade: “Entonces, me vuelvo a dar ánimos y comienzo de nuevo”.
Firme en esa determinación, con el brío de no darse por vencida, esta socia de Jerusa ha llegado a pensar, si en determinado momento se viera sola frente al negocio, haría hasta lo imposible para salir adelante.
Minutos antes de iniciar con la entrevista Rosario venía de enviar un paquete con su producto a uno de los estados del norte del país. Agotada físicamente, no dudo ni un segundo en mostrar alegría y un orgullo cuando al hablar de Jerusa se trata. Su capacidad resiliente la ubica en esa clase de personas que no miran los fracasos como tal, sino, como lecciones que pueden enseñar más que el mismo éxito. En su desafortunada experiencia al participar en las expos e intentar introducir el producto en otra zona geográfica –fuera de la ciudad de Oaxaca-, Rosario aprendió a sobreponerse al propio desánimo, a sus errores y seguir luchando por su proyecto. Con mayor ahínco está al pendiente de oportunidades que permitan equipar, proporcionen los recursos para fortalecer esa diversificación de productos que ella y sus socias tienen en mente.
La presidenta de Productos Lácteos Jiménez Méndez relata los sacrificios que ha hecho, desde recibir críticas duras por experimentar fuera de la ciudad, incluso del estado, al tratar de innovar, el tiempo
perdido –ella indica, no perdido, invertido- en trámites, ir y venir, saltarse comidas, caminar, cargar pesado, ser víctima de las condiciones sociopolíticas de la ciudad (bloqueos, marchas, manifestaciones, etc.), señalamientos al grado de sugerirle que busque un empleo y sea como las demás personas “normales” con sueldo. Y, obviamente la pregunta incómoda, ¿Por qué no desistes, por qué no te conformas con una pequeña empresa que te dé de comer, conformarte con lo que ahora tienes?
Rosario suspira y dice. “A veces nos desmotivamos. Alma Delia que es bien luchona, la encargada de produccción, por el enorme esfuerzo físico, quisiera desistir. Entonces yo la animo. Nos animamos” Y ahí nuevamente su capacidad emprendedora de Rosario, esa resistencia al fracaso, le ha permitido desarrollar un gran sentido de compromiso, una fuerte sensación de control sobre los acontecimientos y una apertura a los cambios. Rosario se percibe segura, confiada en sus potencialidades. Sabe que si en algún momento pudo obtener el aporte para conseguir hacer crecer a su empresa, pues existe la segunda y muchas más para conseguirlo. No abdica por no conformarse, por no darse por vencida, por querer darle trabajo a personas que lo necesitan –ancianos, madres solteras, jóvenes-, todo lo que realiza es para beneficiar a su familia.
Efectivamente, por su cabeza ha cruzado la idea de emplearse pero no para vivir su vida así, sino para
inyectarle más recursos a Jerusa.
Rosario a persepción de quien la entrevista, podría decirse que ha adoptado esa capacidad a su personalidad, la ha hecho ya parte suya, de su ADN. Se percibe capaz de un desempeño superior y, además, genera beneficios: no solo es la presidenta, es gestora, motivadora e insita a la innovación”
Otra caracteristica de Rosario es su carisma, eso la hace altamente sociable, asertiva y con la facilidad de continuar entablando relaciones de amistad y trabajo. Esa habilidad es también utilizada para perfilar todos los elementos hacía el logro de sus objetivos: Hacer crecer y expandir a Jerusa. Esos contactos le han ayudado a fortalecer, posicionar y hacer a Jerusa un ente competitivo.
Hoy en día Jerusa lleva poco más de dos años tributando, facturando, con una marca registrada, utilizando código de barras para diez productos y además, cuenta con un pequeño taller para el proceso de producción de los productos. Otra ventaja competitiva es el sabor propio de la elaboración artesanal del queso y quesillo, un sabor peculiar a Oaxaca.
Rosario conoce lo espinado del camino, del ir y venir en dependencias, de la competencia, de las fricciones que entre las mismas socias/hermanas puede haber; está conciente que aunque hay crecimiento, no puede estancarse, hay mucho por trabajar en la organización, fijación de objetivos, direccionar de mejor manera y, sin falta, como pildora mañanera, nuestra emprendedora se repite: Tenemos que poder, la competencia siempre va a estar, no hay que desanimarse. Tienes que poder. La cosa es buscarle.
Al momento de ser entrevistada, la presidenta de Jerusa indica estar por iniciar parte del proceso de envasado al alto vacío y el etiquetamiento de su producto –tabla nutrimental-, ampliando la gama de productos que ofrece en el mercado (aderezos) e innovando algunos que ya comercializan añadiendoles nuevos ingredientes (quesos botaneros).
Rosario ha hecho su fortaleza la resilencia. La panacea para sus sueños. Y, para mi sorpresa, viendola un poco exahusta despues de haber caminado por las calles cargando un paquete de su producto, atravesar la ciudad en colectivos, todavía se daba tiempo de asistir a un ensayo de danza. Porque, además su empresa le brinda el agrado de darse tiempo para realizar sus pasiones: bailar, dibujar, convivir con su familia; porque su mayor orgullo es eso, trabajar en equipo, hacer amistad, trabajar en familia.
Y despidiendonos Rosario comentando algunas participaciones dancisticas en las fiestas de la Guelaguetza en su pueblo, Reyes Etla, aún recalca: No quiero ser perfecta ni especializarme en algo, me gusta vivir la experiencia. Yo soy mi propia jefa.
Admirando su capacidad de resistencia al fracaso, despojandose de ese mismo como si se sacudiese del polvo, Rosario ama a Jerusa y lo expresa diciendo que en ella ha puesto toda su fe, la decisión, la entrega, coraje y acción.
Rosario Jiménez Méndez representa a Jerusa, representa
a Procesadora de lácteos Jiménez Méndez y es emprendedora.
Biografía:
Rosario Jiménez Médez Nació en Reyes Etla el 6 de Octubre de 1985. Se graduó en el Instituto Tecnológico de Oaxaca en la Carrera de Licenciatura en Administración de Empresas.
Es presidenta de Procesadora láctea Jiménez Méndez SC de RL de CV., y participa en la Integradora de Productores Auténticos de Queso y Quesillo de Reyes Etla SA de CV.
Procesadora Láctea Jiménez Méndez SC de RL de CV
Integrada por seis socias: Virginia Méndez Méndez (madre), Alma Delia, Liliana, Rosario, Mariana y Yadira Cecilia Jiménez Méndez (hermanas)
La cooperativa es representada por:
Presidenta: Rosario Jiménez Méndez
Secretaria: Alma Delia Jiménez Méndez.
Tesorera: Liliana Jiménez Méndez.
Y un consejo de vigilancia integrado por:
Presidenta: Mariana Jiménez Méndez.
Secretaría: Yadira Cecilia Jiménez Méndez.
Jerusa es la marca registrada para sus productos. Es una palabra hebrea que significa “Herencia”.
Fue puesto con la intención de que el negocio familiar, que se ha venido heredando, continúe esa trayectoria.
Los elementos que componen el logotipo son: la Iglesia de Etla, edificación que representa el lugar nativo de la elaboración del producto. La vaca, por ser un producto derivado de la leche. Líneas al contorno que simulan las hebras del quesillo, resultantes del proceso de amasado.
Los productos que ofrecen son: Queso fresco, quesillo, crema, mantequilla, queso tipo panela, botanero tipo panela, requeson blanco y yogurt.
Proximamente innovarán con ingredientes diferentes al queso botanero e incursionarán con un producto no existente en el mercado el cual es aderezo a base de requeson con diversos sabores.
- Una frase de Albert Einstein: “Si buscas resultados distintos no hagas siempre lo mismo”
Agradecemos a Rosario nos haya permitido conocer su
historia.
Si nos permite decirlo, su padre estaría muy orgulloso de ella,
de
sus hermanas y su esposa que a pesar de las adversidades,
han salido adelante
y han crecido.
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